top of page

Te perdono

  • Foto del escritor: Solimar Cedeño
    Solimar Cedeño
  • 9 ene 2021
  • 2 Min. de lectura

Actualizado: 19 sept

Mujer dándose un abrazo de amor propio

Te perdono por callar tu voz para que la de otros sonara más fuerte.


Te perdono por haber querido buscar desesperadamente el amor afuera cuando siempre lo has tenido dentro.


Te perdono por no haber creído en todo tu potencial.


Te perdono por haberle dado el poder de tu felicidad a alguien más.


Te perdono por no haber dicho “NO” cuando por dentro lo gritabas.


Te perdono por haber callado ese “SÍ” que te pudo haber liberado de tantas cadenas.


Te perdono por permitir que otros alimentaran tu culpa.


Te perdono por castigarte injustamente.


Te perdono por haber soportado tanto de los demás solo por buscar su aprobación o cariño, aunque en el camino hayas sido infeliz.


Te perdono por querer complacer a otros por encima de tus propios deseos.

Te perdono por aceptar las proyecciones de otros sobre ti y hacerlas tuyas.


Te perdono por haber proyectado en los demás tus defectos y carencias.


Te perdono por mentirte.


Te perdono por aceptar un “amor” a medias.


Te perdono por darle oportunidades al dolor y no al perdón.


Te perdono por tener tantas expectativas sobre otros.


Te perdono por albergar odio en tu corazón.


Te perdono por haber permitido que otro marcara tu piel y tu alma con dolor por creer que lo merecías.


Te perdono por haber permitido que la sombra se apoderara de ti. Nos pasa a todos. No hay problema.


Te perdono por jugar tu papel de víctima para querer liberarte de tus responsabilidades.


Te perdono por estar en guerra contigo.


Te perdono por haber abandonado a tu niña interior.


Te perdono por tener apegos dañinos.


Te perdono por no recordarte a diario lo valiosa que eres.


Te perdono por juzgarte tan duramente.


Te perdono por aferrarte a los pensamientos, culpas y patrones dañinos heredados de tus ancestros.


Te perdono por haber querido rendirte.


Te perdono cada pensamiento y acción que te desgarró hasta desear la misma muerte.


Te perdono por criticar tu apariencia y no sentirte feliz al ver tu reflejo.


Te perdono todas las sonrisas fingidas cuando por dentro te sentías rota.


Te perdono los “estoy bien” que dijiste cuando en realidad no lo estabas.


Te perdono por llenar tu vida con rencor y actuar visceralmente impulsada por él.


Te perdono porque te amo, porque lo vales y lo mereces. Porque es el primer paso para amarte profundamente desde el agradecimiento. Porque no mereces migajas de amor y mucho menos de ti misma.


¡LO SIENTO, PERDÓNAME, TE AMO, GRACIAS!

Entradas recientes

Ver todo

Comentarios


© 2025 Creado por Solimar Cedeño con Wix.com

bottom of page